El apartamento que hoy quiero compartir con todos vosotros me ha llamado la atención fundamentalmente por dos razones. La primera de ellas no tiene que ver con la decoración, y es que la vivienda está en Polonia, concretamente en el centro de Varsovia, una localización con apenas presencia en las publicaciones de decoración.
La segunda de las razones es que se trata de un ejemplo perfecto de eso que tanto me gusta: el eclecticismo, y la perfecta convivencia de estilos y tendencias. En el apartamento, de apenas 46 m2, sus propietarios, una joven pareja formada por una diseñadora gráfica y su novio, han mezclado elementos vintage, procedentes de mercados de segunda mano, con mobiliario mucho más funcional, de Ikea, y algunos clásicos del XX.
El resultado a mí me gusta mucho tanto por el mix de elementos decorativos como por haber sabido sacar un partido muy efectivo a la escasez de metros cuadrados. Un buen proyecto de interiorismo y decoración.
¿Qué os parece?
Vía: Ikea Family Live
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